Nueve meses de embarazo

Mañana voy a ser madre. Me han programado una cesárea. Mi vida va a cambiar para siempre.


Lo que he aprendido de la maternidad hasta hoy:

Cuando una persona te da un consejo, hay otra que te da el opuesto. Hay que aceptarlo rápido porque intuyo que esto es solo el principio. Incluye a médicos, farmacéuticos, gurús y amigos.Yo intentaré dejarme guiar por mi intuición.

Vivimos entre dos tipos de maternidad: La de nuestras madres o abuelas, donde la disciplina, los horarios marcados, y las reglas definen el trato con tu bebé. Y la opuesta, centrada en una “crianza natural”, basada en cumplir las necesidades del bebé a demanda en todos lo ámbitos.

Parece que son totalmente opuestas y eres de una o de otra. Se genera el efecto de lo que es bueno y lo que es malo. Ambas vienen acompañadas de sentencias definitivas que provocan un sentimiento asfixia a la madre que los recibe, principalmente si es primeriza y está hambrienta de información que te permita a hacer lo que todos queremos, lo mejor para nuestros hijos.

Dar consejos debería ser una formación reglada, dado el efecto que puede tener en la persona que los recibe. El consejo que nunca daré a una embarazada y en mi caso ha sido el “consejo” más repetido, desde mis amigas que quieren lo mejor para mi hasta desconocidas al verme la tripa en el ascensor.

“Duerme ahora todo lo que puedas

Seamos honestos, no es un consejo, es una queja encubierta. Le estás trasladando a esa persona tu malestar. Estas respondiendo a lo que echas de menos de tu vida anterior. Tendría sentido si pudiéramos acumular sueño en un frasco en la cocina, pero no se puede. En mi caso donde el insomnio ha sido una de las principales molestias, escuchar esto a diario me ha generado más ansiedad. Pensando que ya desde el principio no estaba haciendo lo que debería hacer.

Creo que lo mejor que le puedes hacer a una embarazada es preguntarle cómo está, cómo se siente, si tiene alguna duda que tú le puedas resolver y en base a lo que escuchas le cuentas la que que para ti ha sido tu experiencia.

Si alguna amiga me pidiera consejo sobre su embarazo, le daría los que me han dado a mi hasta ahora y me han aportado paz y tranquilidad, el mejor estado para afrontar lo que está por venir:


  • Estas diseñada para esto. Tu cuerpo tiene toda la sabiduría para enfrentar lo que viene. Hay cientos de miles de años de genética detrás que te aportan el conocimiento que necesitas.

  • No hay una sola forma correcta de hacerlo. Cada embarazo y cada niño es un mundo, por eso no valen las sentencias firmes de ninguna de las corrientes. Lee, investiga, es muy importante, sin olvidar que la mayoría de lo que lees es información, no una verdad inmutable.


A mi aún me cuesta poner esto en práctica, me muero de ganas de que me den un manual de instrucciones con unas reglas a cumplir que aseguren que todo irá tal y como quiero, pero hay que asumir que no existe tal manual, por mucho que libros y amigas nos confirmen lo contrario.

Lo que funciona en los demás no necesariamente es aplicable a tu caso.

Así que si pudiera metería una cosa más en la maleta que me llevaré mañana al hospital: flexibilidad.

*Este texto lo escribí el 18 de Mayo del 2019. Ella es Clara que llego al día siguiente :)

*Este texto lo escribí el 18 de Mayo del 2019. Ella es Clara que llego al día siguiente :)

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